I.
PENSAMIENTO
PRE-FILOSÓFICO
El hombre siempre se ha escudriñado a
sí mismo y a su entorno, incluso antes
de conocer el método científico y el filosófico, como el pensamiento racional
para justificar su realidad, el ser humano comenzó a transitar por el camino
del conocimiento interpretando su realidad basándose por la magia, el mito y la
religión. En este primer apartado nos tocará indagar sobre la interpretación de
la realidad.
1. MITO.
Es la narración maravillosa situada
fuera del tiempo histórico y protagonizada por personajes de carácter divino y
heroico. El mito nace por la necesidad de explicar la realidad en que vive el
hombre, la mitología se convierte en la
explicación del origen de las cosas y del ser humano; la mitología es
considerada como la primera forma de hacer historia, mediante relatos sagrados
y acontecimientos remotos e imprecisos, se les considera sagrados porque son
historia de seres mitológicos o seres divinos. Los poetas griegos eran quien
escribían dichos mitos porque ellos solo podían por ser considerados los
intérpretes de los dioses, por ende fueron considerados como guías del
comportamiento de los hombres en la sociedad hasta la llegada de la
especulación filosófica.
TIPOS DE MITOS
Existen diferentes tipos de mitos:
MITOS TEOGÓNICOS, que dan una explicación del origen de
los dioses.
MITOS MORALES, son los que nos brindan una explicación
del bien y del mal.
MITOS FUNDACIONALES, los que nos cuentan la fundación de
las ciudades por intervención de los dioses.
MITOS ESCATOLOGICOS, estos nos hablan de la astrología y
muchos del fin del mundo.
MITOS ANTROPOGONICOS, son los que nos hablan de la
aparición del ser humano y como los dioses nos enseñan a vivir sobre la tierra.
MITOS COSMOGÓNICOS, son los que se refieren sobre la
creación del mundo.
2. LA MAGIA
En el camino que le hombre ha iniciado
para responder a las interrogantes de su existencia encontramos otro elemento
que es la magia. La magia ha sido considerada, por mucho tiempo el acto por el
cual se pretendía intervenir mediante hechos o palabras producir con ayuda de
espíritus o demonios efectos que van en contra de las leyes naturales, hay
autores que mencionan que, la magia tiene una estrecha vinculación con la
ciencia, que procede de muchas culturas antiguas, solo por mencionar algunas la
mesopotámica y la egipcia, que consideraban la magia como la ciencia sagrada,
el antropólogo escocés James George Frazier, menciona que la magia es un
fenómeno del pensamiento pre-religioso[1], esto es porque la magia
se considera como la forma de comunicarse con fuerzas supra-mundanas o
supremas, sin embargo, también cataloga a la magia como pre-científico debido
que la magia y la ciencia tienen un principio fundamental, la afirmación que la
naturaleza está regida por leyes inmutables proporcionando la posibilidad de
previsión y el cálculo de los hechos.
Existe dos principios fundamentales en
la magia, el primero es la afirmación que, los acontecimientos que se producen
en el universo siguen una leyes inmutables que pueden ser conocidas, el segundo,
que el conocimiento de dichas leyes nos dan la posibilidad de la previsión de
algún fenómeno.
Existen distinciones entre la magia y
la ciencia; primero es, que la ciencia se niega a reconocer la posibilidad de
la existencia de una realidad espiritual mientras que la magia se guía de ella,
también se percibe el problema del lenguaje, si bien la terminología es
semejante la conceptualización es diferente; otra distinción es el uso del
conocimiento obtenido. La magia se usó y se sigue utilizando en nuestros días
como fuente de sanidad tanto en lo corporal como en lo espiritual.
3. LA RELIGIÓN
El pensamiento religioso aparece en el
antiguo Egipto, con lo que llamamos estructuración de lo mágico, se sustenta en
la plena convicción de que la realidad no se agota en todo aquello que perciben nuestros sentidos, hay un
intermediario entre los dioses y los hombres.
La religión se encuentra en la
concepción idealista esto es porque la religión está aislado a todo tipo de
ciencia o lógica. Entre los muchos conceptos de religión podemos encontrar
estas descripciones que engloba su esencia o manifestación, es la vinculación
del hombre a Dios, la unión de varios individuos para el cumplimiento de un
rito religioso, ser religioso es estar relacionado a Dios, es para responder
las grandes cuestiones fundamentales de la realidad; muchas culturas toman este
pensamiento religioso para encontrar la “paz interior”, mediante diversos ritos
como son los sacrificios, las ofrendas, etc. Porque serán manifestación de la
guía de comportamiento del hombre en este mundo. Podemos encontrar que este
pensamiento se ha diversificado, por ejemplo: politeísmo, su presupuesto es la
existencia de varios dioses; monoteísmo, nos habla de la existencia de un solo
Dios; dualista, supone la existencia de dos principios o divinidades
contrarias; no teístas o ateísmo, que enseña la no existencia de Dios.
Podemos mencionar las semejanzas entre
los elementos del pensamiento pre-filosófico, el mito, la magia y la religión,
podemos citar las siguientes: buscan el conocimiento, quieren explicar la
realidad, entre sus inquietudes encontramos el origen del ser humano y de la
vida. Mientras que sus diferencias son que, en el mito se enfoca en la
fantasía, que con el paso del tiempo se va a transformar y agregar a él
elementos misteriosos; la religión se basa en la fe y el comprender a la
realidad a partir de Dios, es decir, tienen la necesidad de creer para comprender;
por último la magia echa mano de los hechos naturales para da a entender que
manipula los elementos que rigen la realidad del hombre.
II.
Pensamiento
filosófico
Hace veinticuatro siglos, tuvo lugar
un descubrimiento en la Isla de Samos y en las otras colonias griegas que se
habían desarrollado en el transitado Mar Egeo, de repente surgieron personas que creyeron que las cosas
estaban hechos de átomos y que los seres humanos y los animales habían
evolucionados de formas más simples; que las enfermedades no eran causadas por
los demonios; y que el planeta no era más que un planeta que giraba alrededor d
un sol lejano; esta revolución saco al cosmos del caos, en el siglo VI a. de C.
se desarrolló aquí una idea, se mantenía que el mundo sensible era cognoscible,
porque había un orden y reglas en la naturaleza que permitían descubrir sus
secretos, este orden fue llamado el cosmos. Este fue el primer conflicto ente
la ciencia y el misticismo, entre la naturaleza y los dioses.
Por qué se dio en las islas griegas y
no en las grandes ciudades de la India, Babilonia o China, porque en las islas
jónicas, recién colonizadas estaban abiertas y gracias a la diversificación y
la inconformidad hizo posible la apertura de la mente de los griegos, ya que
estas islas eran también centros de encuentro de mercancías y culturas con
otros pueblos, y eso llevo a que estuvieran abiertos a preguntar, y, una
pregunta conduce a otra.
Surge así el pensamiento filosófico, para
entender más claramente esta concepción filosófica, mencionaremos sus
características:
Así como es importante
tener presente algunas definiciones de filosofía, también lo es poder reconocer
en éstas una serie de atributos que, independientemente del autor o el
contexto, nos permiten realizar una caracterización de la misma. A continuación
se presentan una serie de rasgos que podrían identificarse dentro del
pensamiento filosófico:
a)
Asombro. Uno de los elementos que caracteriza el saber filosófico
está planteado a partir de la capacidad de asombro que tiene el hombre.
Anteriormente señalamos que fue Aristóteles quien de manera contundente pone de
manifiesto que, gracias a la facultad que posee el ser humano de maravillarse,
observar, contemplar todo cuando le rodea y tratar de buscar respuestas a
cuestiones que desconciertan a su intelecto, es posible el surgimiento de la
filosofía. A partir de un recorrido histórico podríamos identificar diferentes
cuestiones que tradicionalmente han inquietado al ser humano y lo han conducido
a la búsqueda de respuestas explicativas, a saber, la libertad, el alma, el
sentido de la vida, el conocimiento, los valores, etcétera.
b)
Duda. Aunado a la capacidad de asombro que posee el hombre se
encuentra la actitud crítica de dudar, de cuestionar la tradición, la
autoridad, lo cual implica la utilización de la duda como condición
existencial, misma que se expresa a través de experimentar angustia, intranquilidad
o desasosiego ante la realidad, o como método de conocimiento, en la que se establece
como condición de posibilidad para la generación del conocimiento.
c)
Reflexión racional. Estrechamente vinculado a la capacidad de
asombro y duda que caracterizan la filosofía, encontramos un tipo de reflexión
ordenada, coherente, fundamentada en razones, lo cual le otorga el título de
ser un saber de reflexión racional. En este sentido, las explicaciones que
otorga son aceptadas en la medida en que están fundamentadas en argumentos, que
pueden ser discutidos y sometidos a crítica; es decir, las explicaciones que presenta
no son dogmáticas.
d)
Visión totalizadora. A lo largo del tiempo, algunos filósofos han
considerado que otro rasgo que caracteriza a la filosofía es que ofrece una
visión totalizadora de la realidad, en tanto que tiene un objeto de estudio
distinto de las demás ciencias, pues abarca todas las cosas; esto significa que
es el más amplio, ya que no se centra en segmentos o parcialidades de la
realidad, sino en la totalidad de lo real. Así, al tener por objeto de estudio
la totalidad de cuanto existe, se encarga de poner de manifiesto los aspectos
que fundamentan la realidad para tratar de llegar a su esencia. En este
sentido, intenta proporcionar una visión de conjunto de lo real para tratar de
descubrir su fundamento último.
e)
Pregunta. Otro de los aspectos que caracterizan a los
planteamientos filosóficos se evidencia a partir de la estructura con la que
plantea las cuestiones que han sido de capital importancia a lo largo de los
siglos. Los grandes problemas de la filosofía están expresados en forma de
preguntas; por ejemplo, para Aristóteles la filosofía puede ser entendida como una
indagación causal, en tanto que es una búsqueda que interroga por el ser, la
sustancia, el hombre, la realidad, etc., desde su fundamento último. De esta
manera, la pregunta filosófica cobra importancia en la medida que siempre está
orientada hacia la búsqueda– respuesta de los grandes problemas de la
filosofía.
f)
Amor a la sabiduría. Afirmar que la filosofía se caracteriza como
un amor a la sabiduría podría implicar, por un lado, el reconocimiento de nuestra
propia ignorancia y, por otro, la necesidad de ir a la búsqueda de la verdad.
Así, la actividad filosófica consiste en el puro deseo de conocer y contemplar
la verdad, esto es, un amor desinteresado por la verdad a partir del cual es
posible reconocer que la filosofía constituye una pasión libre por la
sabiduría. De este modo, la filosofía constituye un fin en sí misma porque
tiene como objetivo la búsqueda, contemplación y deleite de la verdad.
g)
Formas de expresión. Hemos de reconocer que la filosofía tiene
múltiples formas de expresión, tanto oral como escrita, entre las más comunes
podríamos mencionar el ensayo, el tratado y el diálogo. Centraremos la atención
en una de las formas de expresión más importantes de la actividad filosófica en
la antigüedad y que ha subsistido a lo largo de la historia: el diálogo, el
cual es entendido como una discusión organizada mediante preguntas y respuestas
entre individuos interesados por una misma cuestión en la que se intenta
precisar y respecto de la cual se pueden mantener inicialmente puntos de vista
distintos. Como caso específico, podríamos mencionar que una de las primeras
manifestaciones de diálogo dentro del pensamiento occidental se encuentra en
los Diálogos de Platón.
III.
Definición y disciplinas de la
Filosofía
La
filosofía es el estudio de una variedad de problemas fundamentales acerca de
cuestiones como la existencia, el conocimiento, la verdad, la moral, la
belleza, la mente y el lenguaje. Al abordar estos problemas, la filosofía se
distingue del misticismo, la mitología y ciertas formas de religión por su
énfasis en los argumentos racionales, y de la ciencia experimental porque
generalmente lleva adelante sus investigaciones de una manera no empírica, sea
mediante la especulación, el análisis conceptual, los experimentos mentales u
otros métodos a priori.
La Filosofía es la ciencia que se ocupa de responder las grandes interrogantes que desvelan al hombre, como el origen del universo o del hombre, el sentido de la vida, entre otros, con el fin de alcanzar la sabiduría y todo esto se logrará a través de la puesta en marcha de un análisis coherente y racional que consistirá en el planteamiento y la respuesta de cuanta cuestión se nos ocurra, por ejemplo, qué es el hombre, qué el mundo, qué puedo conocer, qué puedo esperar de tal cosa.
Existen varias definiciones de Filosofía, algunas de ellas son las siguientes:
·
Definición Etimológica: Viene de 2 raíces griegas: "filos" que
significa amor y "Sofía" que es Sabiduría, por lo que Filosofía es
"Amor a la Sabiduría". Esta definición fue acuñada por el
presocrático Párménides, cuando se le preguntó si era sabio.
·
Definición Real Clásica o Aristotélica, también conocida como la
definición nominal: Es la
Ciencia que estudia todas las cosas por sus últimas y supremas causas bajo la
luz natural de la razón.
En términos muy generales, la filosofía es
muy parecida a la ciencia. Podemos entender mejor la filosofía mediante la comparación
de las dos de la siguiente manera:
Al igual que la ciencia, la filosofía es en realidad una colección de disciplinas. La ciencia, por ejemplo, consiste en la física, la química, la astronomía, la arqueología, botánica, etc. Además, estas disciplinas se relacionan entre sí. Por ejemplo, los arqueólogos hacen uso de los resultados, tanto en la física y la química para estudiar las civilizaciones antiguas .; hallazgos en la química pueden ser relevantes a los hallazgos de la física, etc. No es como si la física y la química podrían entrar en conflicto, y, sin embargo, tanto sea correcta. Filosofía también consiste en una serie de disciplinas, cada uno con diferentes sub-disciplinas interrelacionadas:
Como disciplina académica, la filosofía se
ocupa de cuestiones básicas a la realidad humana:
• ¿Qué tipo de seres son seres humanos?
• Si los seres humanos tienen
una capacidad para la razón, lo que es la razón?
• ¿Qué
está involucrado en saber la verdad? ¿Es esto posible para los
seres humanos?
• ¿Es la ciencia la mejor o incluso la única forma
posible de conocer la verdad sobre el mundo?
• ¿Hay verdades que debe saber
que la ciencia no puede alcanzar?
• ¿Qué significa para
actuar racionalmente?
• ¿Cómo está actuando racionalmente
relacionada a actuar moralmente?
• ¿Qué son los valores?
• ¿Hay verdades que debe saber acerca de los
valores?
• ¿Cómo
son los valores relacionados con el hecho de que los seres humanos son seres sociales?
Estas
son sólo algunas de las preguntas básicas de la experiencia humana que las
direcciones de Filosofía. Es importante destacar que estas cuestiones se
refieren no sólo la experiencia humana, pero otras disciplinas académicas
también. Considere lo siguiente: ¿Qué tipo de verdades Qué
Matemáticas buscan? Verdades sobre el mundo? Pensado Quiénes? Verdades necesarias? Verdades que son
universales, pero no necesariamente es así? O considerar: ¿Qué es lo que Economía apunta correctamente en
cuando se estudia la acción humana involucrada en la producción, consumo y
distribución de los bienes?
¿Se adecuadamente apuntar sólo a explicar los patrones existentes de la
acción humana de este tipo? ¿O
bien apunta también a mejorar la acción humana en estas áreas? En
este último caso, ¿se apunta correctamente a mejorar solamente la
racionalidad de la acción humana en estas áreas? ¿O bien apunta también a mejorar la
moralidad de la acción humana en estas áreas? En este último caso, ¿cómo está la
economía relacionada con la ética (una de las zonas centrales de la filosofía),
más en general?
Así como disciplina académica, Filosofía arroja una amplia red y ocupa
preguntas básicas no sólo a la experiencia humana, sino de interés básico a
otras disciplinas académicas también. Hay un gran número
de campos de investigación dentro de la Filosofía. Ellos incluyen:
• Metafísica (¿Qué es la realidad?) ES UNA CIENCIA O DISCIPLINA QUE INTENTA IR MÁS
ALLÁ Y CAPTAR LO ESENCIAL DE LAS COSAS, A ESTA TAMBIÉN SE LE PUEDEN ADJUNTAR LA
TEOLOGÍA Y LA ONTOLOGÍA. LA PRIMERA TRATA PRINCIPALMENTE DE DIOS Y LA SEGUNDA
SERIA EL ESTUDIO DEL SER UN EJEMPLO CLARO DE ESTO PODRÍA SER SI EL SER ES
FINITO O INFINITO
•
Epistemología (¿Qué es el conocimiento?) ESTA SE DIRIGE AL ESTUDIO DEL CONOCIMIENTO, EL
CÓMO PERCIBIMOS LA REALIDAD Y QUÉ ES LO QUE PODEMOS CAPTAR DE ELLA; UN EJEMPLO
PUEDEN SER LA ESENCIA Y LOS ACCIDENTES.
• Lógica (¿Cuál es la estructura de la razón o
razonamiento?) ES EL ESTUDIO DE LOS PRINCIPIOS Y REGLAS QUE RIGEN EL RAZONAMIENTO
VÁLIDO, ESTUDIA LOS MODO CORRECTOS ATENDIENDO LOS DIFERENTES TIPOS DE DIÁLOGO Y
A LAS CUESTIONES QUE TRATAN SOBRE ELLAS.
• Filosofía de la mente (¿Cuáles
son las mentes? ¿Qué se cree? ¿Cómo se relacionan con sus objetos y para el
mundo?) ES EL ESTUDIO DEL ALMA O DE LA MENTE DE UN SER.
•
Filosofía del Lenguaje (¿Cómo lo hace la función del lenguaje como medio de
pensamiento?) La filosofía del lenguaje en sí es, una rama de la filosofía que estudia el lenguaje, es decir, fenómenos como el significado, la verdad, el uso
de la pragmática, el aprendizaje y creación del lenguaje, el entendimiento del lenguaje,
el pensamiento, la experiencia, la comunicación, etc
• Filosofía de la Ciencia (¿Qué es la
ciencia? ¿Cómo es capaz de darnos el conocimiento del mundo?) ESTA DISCIPLINA INTENTA EXPLICAR PORQUE
CONSIDERAMOS CIERTAS COSAS VERDAD, OPINIONES Y OTRAS CON CERTEZA (TEORÍA DE LA
VERDAD)
• Ética (¿Qué son los valores? ¿Cómo debemos
actuar? ¿Qué hace que una acción sea buena o incorrecta, buena o mala?) ES LA TEORÍA SOBRE EL BIEN Y EL MAL. LO QUE
ENTENDEMOS POR ACCIONES MORALES
• Filosofía Política (¿Cuál es la autoridad
política? ¿Cuáles serían simplemente las instituciones parece?) SOBRE LA ORGANIZACIÓN DEL ESTADO, PARA QUE LOS
HOMBRES QUE VIVEN EN UNA SOCIEDAD SE ENCUENTREN EN CONDICIONES FAVORABLES
• Filosofía de la Religión (¿Dios es posible?
¿Podemos saber si Dios existe? ¿Es la fe racional?)
Estos son sólo algunos de los campos de la
investigación dentro de Filosofía y una muestra de sus preguntas básicas.
En todos
estos campos de investigación, las preguntas persigue Filosofía son básicas. marca de éxito en todas las
disciplinas graves. Y preguntas básicas son a menudo los más difíciles. De hecho, a veces el progreso está marcado simplemente por
fin reconocer y aclarar ciertas cuestiones tan básicas, ya que a menudo
es muy difícil llegar a respuestas concluyentes a preguntas básicas. Por lo tanto, a veces se dice que
la filosofía es la disciplina donde el éxito no está marcada por contestar de
manera concluyente, pero reconociendo y aclaratorias. Por supuesto, Filosofía hace a veces
responder a las preguntas básicas, y reconocer y aclarar cuestiones básicas a
veces es una
I . LOS P R E S O C R Á T I C O S
1. La escuela de
Mileto
Se llama presocráticos
a los filósofos griegos anteriores a Sócrates. Esta denominación tiene, por
lo pronto, un valor cronológico: son los pensadores que viven desde fines del
siglo vil hasta acabar el siglo ν antes de Jesucristo. Pero tiene además un
sentido más profundo: los primeros barruntos de la filosofía griega se pueden
considerar como verdadera filosofía porque después de ellos ha habido una
filosofía plena e indudable. A la luz de la filosofía ya madura —desde Sócrates
en adelante—, resultan filosóficos los primeros ensayos helénicos, no todos los
cuales merecerían ese nombre si no fuesen comienzo y promesa de algo ulterior.
Por ser pre-socráticos, por anunciar y preparar una madurez filosófica,
son ya filósofos los primeros pensadores de Jonia y de la Magna Grecia.
No puede olvidarse que si es cierto que el presente depende del pasado, a la
vez refluye sobre él y lo condiciona. Las afirmaciones concretas de los más
viejos pensadores indios o chinos se aproximan con frecuencia a algunos de los
griegos; pero la diferencia capital está en que después de los presocráticos ha
venido Sócrates, mientras que a la balbuciente especulación oriental no siguió
una plenitud filosófica en el sentido que esta palabra tomó en Occidente. Esta
es la razón de la radical diferencia con que se nos presenta el pensamiento
inicial de los helenos y el de los orientales.
Los últimos
presocráticos no son anteriores a Sócrates, sino contemporáneos suyos, en la
segunda mitad del siglo v. Pero quedan incorporados al grupo que le antecede
por el tema y el carácter de su especulación. En toda la primera etapa de la
filosofía se trata de la naturaleza (φύσις). Aristóteles llama a
estos pensadores
φυσιολόγοι, los físicos; hacen una física con método
filosófico. Frente a la naturaleza, el presocrático toma una actitud que
difiere enormemente de la de Hesiodo, por ejemplo.
Este pretende narrar cómo se ha
configurado y ordenado el mundo, o la genealogía de los dioses; hace una teogonia,
cuenta un mito; la relación entre el mito y la filosofía es próxima,
como adviritió Aristóteles, y constituye un grave problema; pero se trata de
cosas distintas. El filósofo presocrático se enfrenta con la naturaleza con una
pregunta teórica: pretende decir qué es.
Lo que define
primariamente la filosofía es la pregunta que la moviliza: ¿qué es todo
esto? A esta pregunta no puede contestarse con un mito, sino con una
filosofía.
EL MOVIMIENTO.—Ahora
bien: ¿qué es lo que hace a los griegos preguntarse por lo que son las cosas?
¿Cuál es la raíz del asombro que movió por vez primera a los griegos a
filosofar? En otros términos: ¿qué es lo que extraña al heleno y le hace
sentirse extraño a ese mundo en que se encuentra? Repárese en que la situación
de los presocráticos se diferencia de la de todos los filósofos posteriores en
que estos, al plantearse un problema, han hallado junto a él un repertorio de
soluciones ya propuestas y ensayadas, mientras que los presocráticos recurren
de las respuestas que dan la tradición o el mito a un nuevo instrumento de
certeza, que es justamente la razón.
El griego se extraña o
asombra del movimiento. ¿Qué quiere decir esto? Movimiento (κίνησ·ς) tiene
en griego un sentido más amplio que en nuestras lenguas; equivale a cambio o
variación; lo que nosotros llamamos movimiento es solo una forma particular de kínesis. Se distinguen cuatro
clases de movimiento:
1.a, el movimiento local (φορά), el
cambio de lugar;
2.a, el movimiento cuantitativo, es
decir, el aumento y la disminución (ώς- ησις και φθίσις);
3.a, el movimiento
cualitativo o alteración
(άλλοί- ωσις), y
4.a, el movimiento
sustancial, es decir, la generación y la corrupción (γενεαις και φθορά).
Todos estos movimientos, y sobre todo el
último, que es el más profundo y radical, perturban e inquietan al hombre
griego, porque le hacen problemático el ser de las cosas, lo sumen en la
incertidumbre, de tal modo que no sabe a qué atenerse respecto a ellas. Si las
cosas cambian, ¿qué son de verdad? Si una cosa pasa de ser blanca a ser verde, es
y no es blanca; si algo que era deja de ser, resulta que la misma cosa es y
no es. La multiplicidad y la contradicción penetran en el ser mismo de las
cosas; el griego se pregunta entonces qué son las cosas de verdad, es
decir, siempre, por detrás de sus muchas apariencias. Apela de la multitud
de aspectos de las cosas a su raíz permanente e inmutable, superior a esa
multitud y capaz de dar razón de ella. Por esto, lo verdaderamente interesante
es la pregunta inicial de la filosofía: ¿qué es de verdad todo esto, qué es la
naturaleza o principio de donde emerge todo? Las diversas respuestas que se van
dando a esta pregunta constituyen la historia de la filosofía griega.
La filosofía griega tiene
un origen muy concreto y conocido. Comienza en las costas jónicas, en las
ciudades helénicas de Asia Menor, en los primeros años del siglo vi antes de
Cristo, tal vez a fines del VII. Dentro del mundo griego, la filosofía tiene,
pues, un origen excéntrico; solo tardíamente, en el siglo v, aparece la
especulación filosófica en la Grecia propia. Las ciudades de la costa oriental
del Egeo eran las más ricas y prósperas de la Hélade; en ellas se produjo
primero un florecimiento económico, técnico y científico, promovido
parcialmente por los contactos con otras culturas, sobre todo la egipcia y la
irania. En Mileto, la más importante de estas ciudades, apareció por vez
primera la filosofía. Un grupo de filósofos, pertenecientes a tres generaciones
sucesivas, aproximadamente, hombres de gran relieve en la vida del país,
intentan dar tres respuestas a la pregunta por la naturaleza. A este primer
brote filosófico se suele llamar escuela jónica o escuela de Mileto, y sus tres
figuras capitales y representativas son Tales, Anaximandro y Anaxímenes, cuya
actividad llena el siglo VI.
Tales de Mileto (c. 625-c. 546 a.C.)
Filósofo griego nacido
en Mileto (Asia Menor). Fue el fundador de la escuela jónica y de la filosofía
griega, está considerado como uno de los Siete Sabios de Grecia. Es famoso por
sus conocimientos de Astronomía, después de predecir el eclipse de sol que
ocurrió el 28 de mayo del 585 a.C Se dice también que introdujo la geometría en
Grecia.
Según Tales, el
principio original de todas las cosas es el agua, de la que todo procede y a la
que todo vuelve otra vez. Antes de Tales, las explicaciones del universo eran
mitológicas, y su interés por la sustancia física básica del mundo marca el
nacimiento del pensamiento científico.
Anaximandro (611-c. 547 a.C.)
Filósofo, matemático y
astrónomo griego. Nació en Mileto (en la actual Turquía). Discípulo y amigo de
Tales de Mileto. Anaximandro está considerado el descubridor de la oblicuidad
de la eclíptica, introductor del reloj de sol en Grecia y fundador de la
cartografía. Anaximandro postulaba una teoría del origen del Universo que
defendía que éste era el resultado de la separación de opuestos desde la
materia primaria. (Así, el calor se movió hacia fuera, separándose de lo frío
y, después, lo hizo lo seco de lo húmedo. Critica la atribución del arjé a
una sustancia particular, argumentando que la materia limitada y finita no
puede dar lugar a lo infinito y eterno.
Afirma que el primer
principio, o apeirón (apeiron), posee un carácter indeterminado.
Sostenía que todas las cosas vuelven con el tiempo al elemento que las originó
que el arché era el Ápeiron (lo indeterminado, aquello que carece de límites.
Anaxímenes (c. 570-500 a.C.).
Filósofo griego de la
naturaleza, el último miembro de la escuela jónica. Nació en Mileto (Jonia), en
Asia Menor. Anaxímenes afirmaba que el aire es el elemento primario al que
todas las demás cosas pueden ser reducidas. Para explicar cómo los objetos
sólidos se forman a partir del aire, introdujo las nociones de condensación y
rarefacción. Estos procesos, afirmaba, transforman el aire, en sí mismo
invisible, en entidades visibles —como el agua, el fuego y las materias
sólidas—. Pensaba que el aire se calienta y se vuelve fuego cuando se rarifica
y que se enfría y se vuelve sólido al condensarse. La importancia de Anaxímenes
no radica en su cosmología sino en su intento de descubrir la naturaleza última
de la realidad. (El aire no hay que entenderlo aquí como un principio concreto
a la manera de Tales, ni indeterminado, a la de Anaximandro, sino como
principio vital, esto es, capaz de dar vida y de transformar las
manifestaciones de ésta).
Escuela pitagórica
La caída de las
ciudades jonias bajo el poder persa, determina el desplazamiento del centro de
gravedad filosófico hacia Grecia. Florece un movimiento, de fondo místico y
religioso y con una proyección social que lleva a sus adeptos, a desempeñar un
controvertido papel político: Se refiere a los pitagóricos, cuya sociedad muy
bien podría calificarse de secta. Pitágoras funda esta escuela, llamada a
perdurar, bajo diversas formas, hasta la época helenística. La base de la
enseñanza es la ciencia de los números.
Otro aspecto
fundamental de la enseñanza pitagórica, y no bien conocido tampoco, es el
sistema moral que postula, cuyo eje es la transmigración de las almas.
Pitágoras (c. 582-c. 500 a.C.).
Filósofo y matemático
griego, cuyas doctrinas influyeron mucho en Platón. Nacido en la isla de Samos.
Fue instruido en las enseñanzas de los primeros filósofos jonios. En Crotona,
una colonia griega al sur de Italia, fundó un movimiento con propósitos
religiosos, políticos y filosóficos, conocido como pitagorismo. La filosofía de
Pitágoras se conoce a través de sus discípulos.
Para Pitágoras y los
pitagóricos la esencia permanente del mundo puede encontrarse en los principios
matemáticos y especialmente en los números (estudio de los números pares,
impares, primos y de los cuadrados) La propuesta surgió de la escuela
pitagórica, caracterizada por la identificación del arché con los números. Hay
que considerar que la escuela pitagórica no consideraba al número como algo
abstracto (concepción actual), sino que lo veían como algo real. Lo
consideraban la más real de las cosas y precisamente por esto lo concebían como
el principio constitutivo de las cosas.
Con sus doctrinas
básicas, los pitagóricos asumieron ciertos misterios, similares en muchos
puntos a los enigmas del orfismo. Posteriormente surgió de manos de Pitágoras
la escuela pitagórica, caracterizada por la identificación del arché con los
números. Los pitagóricos creían en la inmortalidad y en la trasmigración del
alma.
Teoría de los números. Para los pitagóricos el estudio de los
números llegó a ser el principio crucial de toda proporción, orden y armonía en
el universo. A través de estos estudios, establecieron una base científica para
las matemáticas. En geometría el gran descubrimiento de la escuela fue el
teorema de la hipotenusa, conocido como teorema de Pitágoras.
Astronomía. La astronomía de los pitagóricos marcó un
importante avance en el pensamiento científico clásico, ya que fueron los
primeros en considerar que la tierra giraba con otros planetas alrededor del
sol. Explicaron el orden armonioso de todas las cosas como cuerpos moviéndose
de acuerdo a un esquema numérico, en una esfera de la realidad sencilla y
omnicomprensiva. Como los pitagóricos pensaban que los cuerpos celestes estaban
separados unos de otros por intervalos correspondientes a longitudes de cuerdas
armónicas, mantenían que el movimiento de las esferas da origen a un sonido
musical, la llamada armonía de las esferas.
Heráclito (c. 540-c. 475 a.C.)
Filósofo griego, quien
sostenía que el fuego era el origen primordial de la materia y que el mundo
entero se encontraba en un estado de cambio constante. Nació en Éfeso, una
antigua ciudad griega en Asia Menor. Es llamado algunas veces el oscuro. En
cierto sentido, Heráclito fue uno de los iniciadores de la metafísica griega,
aunque sus ideas se derivan de las de la escuela jónica. Incorporó a la noción
de "ser" de sus predecesores el concepto de "devenir" o
flujo, al que consideró una realidad básica subyacente a todas las cosas,
incluso a las más estables en apariencia. Para aclararlo, “afirmaba que una
persona no podía bañarse dos veces en el mismo río”. Para Heráclito, su
principio es la dialéctica misma.
En ética introdujo un
nuevo énfasis social, manteniendo que la virtud consiste en la subordinación
del individuo a las leyes de una armonía razonable y universal. Aunque su
pensamiento estaba influido por la teología popular, atacó los conceptos y
ceremonias de la religión popular de su tiempo. Se le atribuye la obra De la
Naturaleza de las cosas
Hipócrates de Quíos Fue un matemático, geómetra y astrónomo
griego, que vivió aproximadamente entre el 470 y el 410 a. C.. Nació en la isla
de Quíos, enfrente de las costas de la actual Turquía. Hipócrates de Quíos fue
originariamente un comerciante. Después de ciertos contratiempos —por ejemplo,
que le robaron tanto piratas como oficiales de aduanas corruptos—, marchó a
Atenas, posiblemente para litigar. Debió dedicarse a la enseñanza para
sobrevivir, y terminó desarrollándose como un matemático destacado. Según
Aristóteles, aunque era destacado como geómetra, era estúpido y falto de
sentido común en otros aspectos.
La tendencia de
abstracción y sistematización de la Geometría encontró un fuerte impulso en la
obra de Hipócrates de Quíos, el geómetra más importante del siglo V a. C. Para
aglutinar todo el saber matemático de su época, escribió una obra de carácter
enciclopédico titulada Elementos, en el que expone teoremas a partir de
unos axiomas y postulados. Aunque esa obra no nos ha llegado directamente, se
sabe de ella a través de los relatos de Eudemo (335) resumidos por Simplicio de
Cilicia en el 530 d. C.) y más tarde Euclides incluyó esos teoremas en los
libros 1º y 2º de su colección titulada Elementos de Euclides.
Partiendo de un sistema
de axiomas o verdades a priori, que tenían carácter intuitivo utilizó por primera
vez el conocido esquema premisa-teorema-demostración. Introdujo la designación
de figuras geométricas por letras, el método de demostración por el absurdo.
Fue el primero en calcular áreas de regiones delimitadas por segmentos
curvilíneos no rectos, en relación con el problema de la cuadratura del
círculo. Para ello se valió del teorema que afirma que «la razón entre el área
de dos círculos es la misma que la razón entre el cuadrado de sus radios». En
relación con la duplicación del cubo probó que esta era posible siempre que
pudieran encontrarse medias proporcionales entre un número y su duplo.
Mecanicismo
Concepción que cree
posible explicar la realidad en términos de materia, movimiento local, leyes
naturales estrictas y determinismo.
El mecanicismo goza de
gran prestigio en la edad moderna, en donde muchos autores lo defienden para
oponerse a la física escolástica y las concepciones mágicas del renacimiento, y
de ese modo evitar el simbolismo.
Filósofos mecanicistas:
Empédocles (c. 493 a.C.-433 a.C.).
Filósofo griego,
estadista y poeta, nacido en Agrigentum (hoy Agrigento), Sicilia, discípulo de
Pitágoras y Parménides. Instituyó una democracia en Agrigentum.
Afirmaba que todas las
cosas están compuestas de cuatro elementos principales: tierra, aire, fuego y
agua. Dos fuerzas activas y opuestas, amor y odio. De acuerdo con Empédocles,
la realidad es cíclica (y en ella intervienen todos los elementos y fuerzas)
Creía también que no es posible que ningún cambio conlleve la creación de nueva
materia. Asimismo formuló una primitiva teoría de la evolución en la que
declaraba que las personas y los animales evolucionaban a partir de formas
precedentes.
Anaxágoras (c. 500-428 a.C.).
Filósofo griego
responsable de introducir la noción de nous (en griego 'pensamiento' o
'razón') en la filosofía de los orígenes; sus predecesores habían estudiado los
elementos como realidad última.
Nació en Clazomenae y
fue el primer pensador en establecerse (c. 480) en Atenas, más tarde un
destacado centro filosófico. Entre sus alumnos se encontraban el estadista
griego Pericles, el dramaturgo griego Eurípides, y quizás también Sócrates. Se
le encarceló acusado de impiedad al sugerir que el Sol era una piedra caliente
y la Luna procedía de la Tierra. Después marchó a Jonia donde murió. Anaxágoras
explicó su filosofía en su obra Peri physeos. Mantenía que toda la
materia había existido en su forma primitiva como átomos o moléculas que
existían desde la eternidad; y que el orden que surgió al principio de estos
era efecto de la actuación de una inteligencia eterna (nous) También
consideraba que todos los cuerpos son simples agregaciones de átomos.
Anaxágoras marca un
gran punto de retorno en la historia de la filosofía griega; su doctrina del nous
fue adoptada por Aristóteles, y su interpretación sobre los átomos preparó
el camino para la teoría atómica del filósofo Demócrito.
Hizo un compendio de la
filosofía de la escuela jónica al proponer un principio no físico rector, junto
a una base materialista de la existencia.
Demócrito (460 a.C.-370 a.C.).
Filósofo griego que
desarrolló la teoría atómica del universo. Nació en Abdera, Tracia. Escribió
numerosas obras, pero sólo perduran escasos fragmentos.
Según la teoría atómica
de la materia de Demócrito, todas las cosas están compuestas de partículas
diminutas, invisibles e indestructibles; de materia pura e indivisible que se
mueve en el vacío. Los átomos chocan y
giran, formando grandes agregaciones de materia, a consecuencia de esto
consideraba el origen del mundo.
En ética, propuso la
felicidad, o 'alegría', como el mayor bien, una condición que se logra a través
de la moderación, la tranquilidad y la liberación de los miedos. En la historia
Demócrito era conocido como el Filósofo Alegre y su teoría atómica anticipó los
modernos principios de la conservación de la energía y la irreductibilidad de
la materia.
La escuela eleática
Es una corriente griega
de filosofía presocrática, que tuvo su apogeo en los siglos VI y V a. C. El
nombre proviene de la ciudad griega de Elea, al sur de Italia, el hogar de
Parménides y Zenón, máximos exponentes de la escuela. El pensamiento eleático
se opone tanto a la filosofía materialista de los milesios como a la teoría del
flujo universal formulada por el filósofo griego Heráclito.
Según los eleáticos, el
universo es en esencia una unidad inmutable, que, siendo infinita en tiempo y
espacio, está más allá de la cognición proporcionada por los sentidos humanos.
Sólo a través de la reflexión filosófica, afirmaban, se puede alcanzar la verdad
última. Las observaciones sensoriales ofrecen tan solo una visión limitada y
distorsionada de la realidad. Los eruditos difieren en si la escuela fue
fundada por Jenófanes o Parménides. Muchas de las doctrinas eleáticas se
basaron en las enseñanzas de Jenófanes, mientras que Parménides desarrolló sus
doctrinas dentro de un sistema de ideas Según este último, la apariencia del
movimiento y la existencia en el mundo de objetos distintos son mera ilusión:
sólo parecen existir.
Las ideas de Pitágoras
y Parménides en realidad nunca supusieron la base del idealismo que
caracterizaría después a la filosofía griega y en particular para el sistema
metafísico de Platón.
Representantes de la Escuela Eleática:
Jenófanes (final del siglo VI y principios del V a.C.).
Poeta griego, filósofo
y reformador religioso, nació en Colofón (Asia Menor) y muerto en Elea. En el
536 a.C., según la tradición, se estableció en la colonia fenicia de Elea.
Allí, según dicen, fundó la escuela eleática, cuyos conceptos filosóficos
fueron más tarde ampliados y sistematizados por su discípulo, el pensador
griego Parménides.
Se conservan fragmentos
sobre sus elegías, sátiras y poemas sobre la naturaleza. Critica en sus obras
el politeísmo, la trasmigración del alma, y el interés griego por el atletismo
a expensas de la sabiduría. Defendió la existencia de un Dios superior, especie
de espíritu universal. Funda su pensamiento en la unidad del ser.
Parménides (515-a.C.- 440 a.C.).
Filósofo griego,
considerado por muchos eruditos como el miembro más importante de la escuela
eleática. Natural de Elea, se cree que visitó Atenas a los 65 años y Sócrates,
entonces joven, le oyó hablar. Parménides expuso su filosofía en forma de
versos y se conserva de él un poema didáctico: “Sobre la naturaleza”. En
ella aboga por la existencia del `Ser absoluto', cuya no existencia declaraba
resultar inconcebible, pero cuya naturaleza admitía ser también inconcebible.
Sostenía que los fenómenos de la naturaleza son sólo aparentes y debidos, en
esencia, al error humano; parecen existir, pero no tienen entidad real.
Fundamenta también que la realidad, `Ser verdadero', no es conocida por los
sentidos, sino que sólo se puede encontrar en la razón. Esta creencia le convirtió
en un precursor del idealismo de Platón. La teoría de Parménides de que el ser
no puede originarse del no ser, y que el ser ni surge ni desaparece, fue
aplicada a la materia por sus sucesores Empédocles y Demócrito, que a su vez la
convirtieron en el fundamento de su explicación materialista del universo.
Veamos parte de su prosa:
“Pues bien, te diré,
escucha con atención mi palabra, cuáles son los únicos caminos de investigación
que se puede pensar uno: qué es y que no es posible ser, este el camino de la
persuasión acompaña, en efecto, a la verdad; el otro, que no es y que es
necesario no ser”.
“Te mostraré que este
sendero es por completo inescrutable; no conocerás, en efecto, lo que no es
(porque es inaccesible) ni lo mostrarás. Pues lo mismo es el pensar y el ser
pensado."
Inspirado probablemente
en la literatura oracular y de misterios, el poema con el cual comienza da a
entender que el contenido que le sigue debe considerarse "revelación"
filosófica.
El núcleo fundamental
del poema se divide en dos partes:
1.
La
vía de la verdad (en la que expone su propia doctrina filosófica).
2.
La
vía de la opinión (doza), en la que utilizando algunos elementos
–posiblemente de origen pitagórico- se expone una cosmología criticada como
"engañosa".
Parménides pretende
pues, construir la vía de la verdad. Y así, deducirá que el Ser ("lo que
es") es ingénito e imperecedero; finito, continuo y único; indivisible e
inmóvil.
En efecto: el ser es
imperecedero y procreado, porque en caso contrario habría que suponer que
procede del no- Ser y vuelve a él; pero el no-Ser es impensable e inexistente.
Del mismo modo, el Ser es "uno", ya que si hubiera otra cosa sería el
no-Ser. Y también inmóvil, porque todo cambio sería hacia el no-Ser. E
indivisible, puesto que el vacío que separaría a las partes sería equivalente
al no-Ser.
El giro abstracto de
Parménides
Se trata un notable
ejercicio de lógica, con lo que se marca una distancia respecto a los primeros
filósofos jonios que hablaban de "los seres" buscando un arché de carácter
concreto e incluso empírico.
La lógica de Parménides
no resulta demasiado convincente dado que solo maneja dos conceptos opuestos:
Ser y no- Ser. Cabe preguntarse entonces qué es lo que quería decir en
realidad.
En primer lugar, puede
interpretarse que el objetivo fue el de demoler la filosofía de sus
predecesores, especialmente la escuela pitagórica. En esta línea, es posible
entender la negación del vacío, el tiempo y la pluralidad. El cambio y el
movimiento son considerados ilusorios. El ataque es puntual contra el dualismo
pitagórico.
El Ser al que
Parménides refiere es la Realidad o, el Mundo. Y Parménides no podía concebirlo
sino como algo corpóreo (la distinción entre lo material e inmaterial aún no
existe. El mundo es algo limitado, compacto, generado e imperecedero,
excluyendo toda posibilidad de cambio y movimiento. Es como "una esfera
bien redonda", inmóvil y eterna.
Finalmente, se observa
que de un modo explícito, se introduce la distinción entre verdad y apariencia
(u opinión) y se otorga primacía a la razón (lo que se puede pensar) por encima
de la apariencias sensibles y engañosas. Zenón de Elea (h. 489-430). Centra su
especulación en el problema del movimiento y el cambio. Y aceptaba la creencia
de Parménides sobre el ser. La intención de Zenón fue desacreditar las
sensaciones, a través de una brillante serie de argumentos o paradojas, sobre
el espacio y el tiempo. Una paradoja clásica afirma que un corredor no puede
llegar a la meta porque, para lograrlo, debe recorrer una distancia; pero no
puede recorrer esa distancia sin primero recorrer la mitad de ella, y así ad
infinitum. Porque existe un número infinito de bisecciones en una distancia
espacial, uno no puede recorrer una distancia en tiempo finito, a menos que
acorte la distancia o aumente la velocidad.
Este argumento, como
muchos otros de Zenón, se proponía demostrar la imposibilidad lógica del
movimiento. Dado que los sentidos nos llevan a creer en la existencia del
movimiento, los sentidos son ilusorios y por lo tanto no existe ningún
obstáculo para aceptar las inverosímiles teorías de Parménides de otra forma.
Zenón es reconocido no
sólo por sus paradojas, sino por establecer los debates filosóficos que
favorecen la discusión razonada. Por todo ello, Aristóteles le consideró el
creador del razonamiento dialéctico.
I. SÓCRATES (Siglo
IV AC.)
Nació en la Antigua
Atenas, donde vivió durante los dos últimos tercios del siglo V a. C.,[][ ][]la época más
espléndida en la historia de su ciudad natal, y de toda la antigua Grecia. Fue
hijo de Sofronisco de profesión cantero, y de Fainarate, comadrona. El
envenenamiento por cicuta era un método empleado habitualmente por los griegos
para ejecutar las sentencias de pena de muerte. Sócrates fue juzgado y,
declarado culpable, cumplió esta pena en el año 399 a. C.
Murió a los 70 años
de edad, aceptando serenamente esta condena, método elegido por un tribunal que
le juzgó por no reconocer a los dioses atenienses y corromper a la juventud.
Según relata Platón en la Apología que dejó de su maestro, éste pudo
haber eludido la condena, gracias a los amigos que aún conservaba, pero
prefirió acatarla y morir.
Sócrates creía en la superioridad de
la discusión sobre la escritura y por lo tanto pasó la mayor parte de su vida
de adulto en los mercados y plazas públicas de Atenas, iniciando diálogos y
discusiones con todo aquel que quisiera escucharle, y a quienes solía responder
mediante preguntas. Un método denominado mayéutica, o arte de alumbrar los
espíritus, es decir, lograr que el interlocutor descubra sus propias verdades.
Sócrates se basa en tres métodos para
dar su teoría sobre el hombre; el primero la ironía, que aplicaba en su frase:
“sólo sé que no sé” con el cual pretendía a llevar a cuestionar a cada persona
que lo escuchara, mediante el diálogo (mayéutica) lleva a primer plano la
discusión sobre los problemas fundamentales del hombre; y por último la
dialéctica es el arte de preguntar con inteligencia basándose en el dialogo. Es
así que gracias a este método llega a la conclusión de que el hombre es alma y
participa de la naturaleza divinal por venir de un alma sempiterna, a quien
podemos denominar Dios. Es la explicación teogenésica: DIOS ES QUEIN DA ORIGEN
AL SER HUMANO, en consecuencia su origen último es de naturaleza divina.
Este logro dice que
el hombre es formado como una unidad de cuerpo y alma y que la vida de ese
cuerpo depende únicamente y
exclusivamente del alma; es decir la razón sobre nuestra animalidad. Otra de la
razones es que quería alcanzar por este método, buscar un análisis detallado de
las diversas cualidades y virtudes humanas, esto significaría para Sócrates,
que podría revelar la verdad ultima del hombre, que era mucho más importante y
urgente que la cuestión física. De este modo el principio socrático es:
“conócete a ti mismo”, significa que el hombre debe conocer su alma y
comprender que fue hecha a semejanza de Dios, lo que permite distinguir del
bien del mal y elegir sin duda el bien. La virtud más elevada del ser
humano es la sabiduría y gracias a ella
puede superar todas las debilidades inherentes a su cuerpo.
II. PLATÓN.
A. LA TEORÍA DE
LAS IDEAS
1. El mito del
Demiurgo
Con este mito Platón explica la relación
existente entre el mundo de las ideas y el mundo de las cosas. Expone que un
Demiurgo, o supremo artesano (Imagen de Dios personal) toma el mundo de las
ideas para realizar y crear el mundo de las cosas. Por lo tanto, el mundo
sensible o de las cosas es una copia, una copia imperfecta, del mundo de las
ideas.
2. El mundo de
las Ideas y el mundo de las cosas
Y es que Platón trata de conciliar las teorías
anteriores. A saber, que la realidad es eterna e inamovible (permanente), y que
la realidad es constante cambio (Perpetuo fluir de las cosas). Según Platón,
existen en realidad dos mundos: el mundo de las ideas, que es perfecto y
perenne; y el mundo de las cosas, que es fugaz e imperfecto. Además establece
una jerarquía de ideas, donde la idea más importante es la de la belleza (para
Platón, belleza significa virtud, el sumo bien) Luego, las cosas son una copia
o imitación de las ideas.
B. ANTROPOLOGÍA PLATÓNICA
1. El mito del carro alado
Este mito sirve
para explicar la concepción que Platón tenía del hombre. En él compara el alma
a un carro alado. El auriga, que dirige el carro, simboliza la parte racional.
El carro está tirado por dos caballos, uno blanco y uno negro. El caballo
blanco son las tendencias positivas, son las pasiones o parte irascible del
hombre. El caballo negro simboliza las tendencias negativas, como son los
deseos bajos o el instinto de conservación. Esta es la parte concupiscible. El
alma (carro) vive en el mundo de las ideas, el auriga controla a los caballos y
logra que se eleve. Si el auriga falla, el carro perderá el equilibrio y caerá
al mundo de las cosas. El alma toma cuerpo terrestre entonces, pero ansía
volver al mundo de las ideas. Sólo lo lograra si logra el amor, amor que para
Platón es el deseo de aquello que no tenemos pero que hemos tenido.
2. Alma tripartita y virtudes éticas
Como ya hemos visto
anteriormente, Platón divide el alma en tres parte: la parte racional, la parte
irascible y la parte concupiscible. Además, afirma que hay tres virtudes que se
corresponden con estas partes. La sabiduría es la virtud de la parte racional.
La fortaleza es la virtud de la parte irascible. La templanza es la virtud de
la parte concupiscible. Si cada parte del alma hace la excelencia y cumple con
su virtud, entonces lograremos que el alma esté en armonía, lograremos lo que
Platón llama justicia.
Estructura
del alma
Platón afirma que el alma tiene tres partes diferenciadas:
·
El Alma Racional. Es el conocimiento y la razón.
Representada en el mito por el auriga.
·
El Alma irascible. Es el Alma de la fuerza y el
honor. Representada en el mito por el caballo noble.
·
El Alma concupiscible. Es el deseo y las pasiones. Representada
en el mito por el caballo caprichoso y desobediente.
Todos nosotros tenemos las tres Almas, pero siempre
tenemos una más desarrollada que el resto. Este detalle será muy importante por
el **pensamiento de Platón**, ya
que tendrá un papel fundamental a la hora de considerar su teoría política,
estrechamente relacionada con la concepción del Alma. También cabe destacar que
el conocimiento posee una motivación ética: conocer permitirá al filósofo, que
es quien conoce, salvarse y poder liberar su alma de la prisión que significa
el cuerpo, y así poder volver al lugar natural del Alma, que no es otro que la
Realidad Inteligible
3. El dualismo alma-cuerpo
Platón ve el alma
como la parte fundamental de la persona. Está presa del cuerpo. Y es que el
alma proviene del mundo de las ideas (ver mito del carro alado) y es lo que
define al ser humano y le permite realizar lo más elevado. El cuerpo es físico
y mortal, propio del mundo de las cosas. Es finito, temporal e imperfecto. Por
tanto, para Platón el alma y su cultivo es el objetivo de la acción humana.
C. EL ESTADO
UTÓPICO O IDEAL
1. La sociedad
de clases: aristocracia
Platón diseña un modelo de Estado que, de
seguirse, logra el bien y la justicia de la sociedad y la felicidad de sus
miembros. La sociedad es necesaria porque es la responsable de la supervivencia
y de la felicidad de los ciudadanos, ciudadanos que no son autosuficientes.
Así, Platón estructura la sociedad en tres clases sociales. Los trabajadores,
que consiguen y elaboran recursos para su polis. Se relacionan con la parte
concupiscible del alma, por lo que su máxima virtud es la templanza. Luego
están los militares, que defienden la polis de cualquier amenaza. Su virtud es
la fortaleza, pues Platón los relaciona con la parte irascible del alma. Por
último tenemos a los gobernantes, que administran el poder político y toman las
decisiones en la polis. Su virtud es la sabiduría y es que según Platón, el
poder político debe ser propiedad de los filósofos porque son los más
preparados y son los que han accedido al conocimiento más elevado (ver mito de
la caverna), de modo que no pueden obrar mal. La clase política se relaciona
pues con la parte racional del alma. Esta estructura tripartita del Estado es
igual que la del alma, así que si las tres partes o clases sociales funcionan
de forma perfecta se logrará la virtud máxima: la justicia de la sociedad. Para
Platón una sociedad debe ser justa por encima de todas las cosas.
2. Educación y
selección de los mejores
Según Platón, la educación es uno de los
elementos básicos para fomentar una sociedad mejor pues, como hemos dicho, el
acceso al conocimiento conduce al bien absoluto. Nadie es malo, sino que es
ignorante. Así, la maldad de la sociedad se puede extirpar mediante la
educación y formación de sus miembros en la filosofía. Para que alguien pueda
llegar a ser gobernante habrá de realizarse una selección. Y este proceso de
selección, que es el motor mismo del Estado platónico, es la educación.
3. Jerarquía de
regímenes políticos
Como hemos visto, Platón plante un Estado
utópico. Un Estado que es aristocrático y donde deben gobernar los mejores.
Todos los demás modelos de Estado, según Platón, son degeneraciones de este
Estado aristocrático. Así tenemos a la Timocracia, degeneración de la
aristocracia. La clase militar toma el poder y mira por su propia felicidad.
Luego tenemos la Oligarquía, degeneración de la Timocracia. En la Oligarquía
los poderosos gobiernan y sólo buscan su propio enriquecimiento y felicidad. De
la oligarquía degenera la Democracia. En la democracia es el pueblo el que se
alza con el poder. Todo el mundo es libre de hacer y decir lo que se quiere. La
dirección del Estado no se reserva a los mejores, sino a los que el pueblo
escoge. Por último, y como degeneración máxima del Estado, está la Tiranía, que
degenera de la democracia. En la tiranía un líder carismático toma el poder y
lo emplea para lo que quiere.
III.
ARISTÓTELES
LA
ANTROPOLOGÍA Y PSICOLOGÍA ARISTOTÉLICA
La teoría
de la sustancia mantenida por Aristóteles le apartará también de la
interpretación platónica del hombre. Platón, en efecto, había concebido al
hombre como el resultado de una unión accidental entre el alma y el cuerpo, dos
entidades de naturaleza diferente que se veían obligadas a convivir
provisionalmente, hallándose el alma en el cuerpo como un piloto en su nave o,
como nos sugiere en el Fedón, como un prisionero en su celda. La muerte
significa para el hombre la separación del alma y el cuerpo. Siendo el alma
inmortal y el cuerpo corruptible, Platón identificará al hombre propiamente con
su alma, por lo que, de alguna manera, concibe la idea de que el fin de la vida
del hombre está más allá de su vida en la tierra.
Aristóteles,
sin embargo, ha de concebir al ser humano de acuerdo con su teoría de la
sustancia, es decir, en consonancia con la idea de que no es posible la
existencia de formas separadas: la sustancia es un compuesto indisoluble de
materia y forma. Además, todas las sustancias del mundo sublunar están
sometidas a la generación y a la corrupción. El hombre, pues, ha de ser una
sustancia compuesta de materia y forma: la materia del hombre es el cuerpo y su
forma el alma. Aristóteles acepta, como era admitido entre los filósofos griegos,
la existencia del alma como principio vital: todos los seres vivos, por el
hecho de serlo, están dotados de alma, tanto los vegetales como los animales.
Pero interpreta también que ese alma es la forma de la sustancia, es decir, el
acto del hombre, en la medida en que la forma representa la actualización o la
realización de una sustancia. Coincidirá pues, con Platón, en la concepción de
que el hombre es un compuesto de alma y cuerpo; pero se separará de Platón al
concebir esa unión no como accidental, sino como sustancial. No existen el alma
por un lado y el cuerpo por otro lado, sino que ambos existen exclusivamente en
la sustancia "hombre" la distinción entre alma y cuerpo es real, pero
sólo puede ser pensada. Por lo demás, el alma no puede ser inmortal, como
afirmaba Platón, ya que no es posible que subsistan las formas separadamente de
la materia. Cuando el hombre muere se produce un cambio sustancial y, como
hemos visto en la explicación aristotélica del cambio, eso supone la pérdida de
una forma y la adquisición de otra por parte de la sustancia
"hombre": la forma que se pierde es la de "ser vivo" (lo
que equivale a decir "ser animado"), y la forma que se adquiere es la
de "cadáver" (lo que equivale a decir "ser inanimado").
Aristóteles
distinguirá en su tratado "De Anima" tres tipos de alma: la
vegetativa, la sensitiva y la racional. El alma vegetativa ejerce las funciones
de asimilación y de reproducción y es el tipo de alma propio de las plantas;
asume, por lo tanto, las funciones propias del mantenimiento de la vida, en lo
que podríamos considerar su escala más baja, ya que son ajenas a ella todas las
funciones sensitivas así como el control del movimiento local. Dado que estas
funciones vitales son comunes a todos los seres vivos todos han de poseer un
tipo de alma capaz de realizarlas.
El
segundo tipo de alma, superior al alma vegetativa, es el alma sensitiva, el
alma propia de los animales. No sólo está capacitada para ejercer las funciones
vegetativas o nutritivas, sino que controla la percepción sensible, el deseo y
el movimiento local, lo que permite a los animales disponer de todas las
sensaciones necesarias para garantizar su supervivencia, tales como las
derivadas del gusto y el tacto; ello permite también a los animales disponer de
imaginación y memoria dos facultades que, para Aristóteles, derivan
directamente de la capacidad sensitiva de los animales.
El
tercer tipo de alma, superior a las dos anteriores, es el alma racional. Además
de las funciones propias de las almas inferiores, la vegetativa y la sensitiva,
el alma racional está capacitada para ejercer funciones intelectivas. Es el
tipo de alma propia del hombre. Siendo el alma la forma del hombre no puede
existir más que un alma que ha de realizar tanto las funciones "irracionales"
de la nutrición y la sensación, como las funciones racionales, intelectivas, la
capacidad de razonar. Las funciones "irracionales" son las señaladas
anteriormente para los otros tipos de alma. Las funciones racionales o
intelectivas son el conocimiento de la verdad en sí misma (la capacidad del
conocimiento científico), y el conocimiento de la verdad con fines prácticos
(la capacidad deliberativa). Para Aristóteles, pues, el alma es no sólo
principio vital, sino, al igual que para Platón, principio de conocimiento. De
hecho, Aristóteles definirá el hombre como animal racional, atendiendo
precisamente al tipo de alma que le es propia; aunque en la Política lo defina,
atendiendo también a las características de su naturaleza, como animal social o
"político".
Se
ha discutido si Aristóteles aceptaba algún tipo de inmortalidad del alma
racional. Parece claro que no respecto a las funciones vegetativa y sensitiva,
que no tienen sentido separadas del cuerpo; también así lo parece respecto a la
parte intelectiva, en cuanto se mantiene en el De Anima la concepción de la
sustancia y, por consiguiente, la imposibilidad de la existencia separada de
las formas, que constituye el núcleo de la crítica a la teoría de las Ideas de
Platón. La cuestión, sin embargo, se oscurece al hablar de la parte activa del
entendimiento, a la que se refiere en el De Anima como siendo inmortal. ¿Cómo
cabe entender esta afirmación en relación con su teoría de la sustancia, que
hace imposible una interpretación dualista de su antropología? ¿Es una simple
metáfora en relación con la "inmortalidad" de la actividad
intelectual? El tema será discutido por los averroístas latinos, entre otros,
quienes considerarán que Aristóteles se refiere a un entendimiento en acto puro
que se identificaría con Dios, pero no al entendimiento individual, que sería
mortal. Opinión distinta mantendrá Santo Tomás de Aquino, considerando que del
silencio aristotélico respecto a la inmortalidad individual del entendimiento
agente no se sigue su negación.
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